Un año ya has cumplido y no consigo olvidar, La primera vez que entre mis manos te conseguí abrazar. Tus enormes ojos no podían esconder, La sorpresa y alegría de podernos conocer. Tú trajiste el hechizo y te convertiste en lucero. Alumbrando nuestras vidas, como un faro marinero. A la virgen te ofrecimos y con orgullo te acogió, Esperando que seas rociero como tu hermana mayor. Solo le pido a la vida haciéndolo de corazón, Que seas justo y sincero lo mismo que lo soy yo. Para Manuel en su primer cumpleaños 22 de Febrero de 2.001